Cuando los gatos caminan sobre nosotros, pueden estar tratando nuestros cuerpos como almohadas humanas.
Tú sabes de qué estamos hablando. Tal vez estés leyendo un libro en el sofá o recostado en la cama, cuando ¡Uf! De repente, tienes varios kilos de pelusa felina paseando por tu cintura. ¿Por qué a tantos de nuestros gatos parece gustarles hacer esto?
Realmente no hay estudios que puedan ayudar a responder esta pregunta, pero, podemos aprender de lo que piensan los conductistas veterinarios.
¿Por qué mi gato camina sobre mí?
Los gatos domésticos como especie no presentan grandes diferencias en el tamaño corporal. Sí, hay algunos gatos que solo pesan de 2 a 3 kilos y otros que pueden alcanzar los 10 kilos o más, pero en comparación con los perros, que pueden variar desde pequeños chihuahuas hasta enormes perros lobo irlandeses, la disparidad de tamaño no es grande. Como gatitos, también pasan por una etapa exploratoria, en la que gatean y trepan por todos los rincones y grietas. A veces, sus exploraciones implican subirse a su madre, compañeros de camada y personas. Los gatitos aprenden que dormir uno encima del otro —y de nosotros— es una sensación placentera. Somos una superficie cálida y suave sobre la que pueden descansar. Curiosamente, los gatos no caminan unos sobre otros cuando crecen, pero probablemente sea porque no tienen cuerpos lo suficientemente grandes para hacerlo, o la disparidad de tamaño suficiente, para que un gato mucho más grande pueda servir como un lugar de descanso cómodo para un gato más pequeño. A medida que los gatitos crecen, son relativamente similares en tamaño corporal y aprenden al interactuar entre ellos que no es agradable caminar sobre otros, muy probablemente debido a las reacciones negativas que reciben cuando intentan hacerlo. Sin embargo, este concepto no se aplica a seres con cuerpos más grandes. Por ejemplo, en las granjas, podemos ver con frecuencia gatos caminar sobre el lomo de vacas reunidas en la sala de ordeño o sentarse sobre el lomo de cabras, ovejas y caballos.
Aunque a nosotros mismos nos gusta apoyar la cabeza en almohadas o el cuerpo en sofás, de niños no tratamos esos objetos con especial cuidado. Es muy posible que los gatos adultos que parecen caminar sobre nosotros estén tratando nuestros cuerpos como si fueran objetos útiles, como sofás, cojines y almohadas. Por supuesto, también pueden abrazarnos para recibir atención y calidez, pero si necesitan ir del punto A al punto B y estamos en el camino, o en un lugar útil, algunos gatos simplemente nos pisarán. Los gatos ciertamente no tienen un concepto de que esto no es educado o que a veces incluso puede lastimarnos dependiendo de dónde pisen. Para ellos, creo que caminar sobre nosotros es solo un medio para un fin.
Entonces, ¿deberías sentirte insultado o molesto si tu gato camina sobre ti? ¡No! Es una señal de confianza y cariño que tus gatos se sientan lo suficientemente cómodos como para pisarte, porque significa que a veces también lo hacen para acostarse sobre ti y tener un poco de tiempo extra para acurrucarse.
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