Nunca es bueno que tu gato muerda. No solo es doloroso, sino que puede ser potencialmente peligroso si no se atiende. Muchas mordeduras de gatos requieren atención médica y pueden infectarse rápidamente si no se tratan.
Entonces, ¿cómo evitas que tu gato muerda? Primero, identifica por qué tu gato puede estar mordiendo en primer lugar. Los gatos muerden porque tienen miedo, están estresados o frustrados. No actúan por despecho o ira. Siempre hay una buena razón (en su mente) detrás del comportamiento.
También es importante tener en cuenta que los gatos sin garras tienen más probabilidades de morder que los gatos que tienen garras, ya que se les ha quitado su principal mecanismo de defensa.
Razones comunes por las que un gato muerde:
- Sobreestimulación (agresión por caricias)
- Juega agresión / Frustración
- Miedo, dolor y estrés
- Comunicación
Sobreestimulación
Para mantenerte a salvo, es importante reconocer las señales sutiles de que un gato puede estar inquieto. Muchos dueños de gatos no se dan cuenta de que su gato ya les ha dado varias advertencias antes de que ocurra una mordedura. Cuando acaricies e interactúes con tu gato, ten cuidado con:
- Sacudidas en la cola o la piel
- Orejas aplanadas
- Pupilas dilatadas
- La cabeza o los ojos girados para mirar tu mano
- Cuerpo rígido
- Bigotes hacia adelante
Todos estos son signos de que tu gato se está sobreestimulando con demasiadas caricias o atención y necesita un descanso. Para muchos gatos, el simple hecho de acariciarlos puede ser tan estimulante que puede resultarles difícil calmarse y comportarse adecuadamente. La mayoría de los gatos darán varias advertencias antes de escalar hasta llegar a morder. Puedes disminuir la posibilidad de que tu gato te muerda mientras lo acaricias prestando atención a sus señales y permitiéndole decidir cuándo ha tenido suficiente.
Agresión por juego
La agresión por juego se ve más comúnmente en gatitos o adultos jóvenes que son la única mascota en el hogar.
La agresión por juego se ve más comúnmente en gatitos o adultos jóvenes que son la única mascota en el hogar. Suele ocurrir cuando el gato ha sido separado de sus hermanos a una edad demasiado temprana. Se caracteriza por que tu gato te embosca los tobillos mientras caminas por la esquina o te muerde las manos y los pies aparentemente de la nada.
Cuando un gatito tiene un hermano o un amigo con quien jugar, pueden enseñarse mutuamente cómo jugar apropiadamente. Cuando ves a dos gatitos luchando y chillando, están aprendiendo el uno del otro cuántos dientes y garras son aceptables durante el tiempo de juego. Si a un gatito no se le da esa salida, tiene que aprender a inhibir las mordidas de los humanos. A continuación, te mostramos cómo manejar las mordeduras de juego de su gato joven:
- Evita usar tus manos para jugar con tu gato. Puede ser adorable rascar la barriga de tu gatito mientras patea y muerde, pero cuando crece y se convierte en un gato adulto, ese mismo comportamiento ya no es lindo. Si tu gato insiste en morderte las manos, ten a mano un pequeño juguete de peluche que puedas alentarlo a morder.
- Si te muerden, lo mejor que puedes hacer es quedarte quieto y no reaccionar. Pon tus manos detrás de tu espalda y ponte de pie. Ignora por completo el mal comportamiento del gato y redirige su atención a una salida de juego adecuada, como una varita de plumas. Repite según sea necesario.
- Puedes responder con un agudo "¡Ay!" Este sonido imita lo que haría un hermano gatito durante un juego demasiado brusco.
- La mayoría de los gatos con agresividad de juego muerden por frustración y aburrimiento. Agregar tiempo de juego estructurado a su rutina de 15 minutos dos veces al día por la mañana y por la noche puede hacer maravillas. Considera agregar rompecabezas de alimentos y elementos de enriquecimiento ambiental como árboles para gatos y cajas de cartón a tu hogar también. A los gatos les encanta la variedad, así que no guardes los mismos juguetes todo el tiempo. En su lugar, rota sus juguetes y mantén a los gatos interesados en su entorno.
Miedo, dolor y estrés
¿Alguna vez has notado que tu gato actúa de manera diferente en el veterinario? Tu gato que es un ángel perfecto en casa se convierte en un terror cuando intentas meterlo en su transportín para ir a dar ese temido paseo en coche. No es que lo esté haciendo a propósito, es mucho más probable que tenga miedo.
Si pones a tu gato en una situación nueva o aterradora, es mucho más probable que muerda. Si sabes que se acerca una visita al veterinario o que habrá un cambio importante en su vida, como mudarse a un nuevo hogar o un nuevo bebé en la casa, primero puedes seguir algunos pasos simples para preparar a tu gato para que lo logre tan libre de estrés como sea posible.
Enseña a los niños cómo interactuar correctamente con tu gato. Si está manipulando al gato bruscamente, persiguiéndolo hasta que se sienta acorralado, o simplemente corriendo y gritando como lo hacen los niños, tu gato podría sentirse preocupado.
Permite que tu gato tenga un lugar seguro en su hogar donde no sea molestado y asegúrate de que los niños y otros visitantes entiendan esto.
Si tu gato se agita mucho cuando llega el momento de ir al veterinario, puedes enseñarle a no odiar el transportador dejándolo al aire libre (¡no escondido en un armario hasta que sea el momento de ir!) y llenándolo con mantas suaves y golosinas deliciosas. ¡Pronto tu gatito aprenderá que el transportador es algo bueno y que no le importará entrar!
Si tu gato te muerde repentinamente cuando no lo había hecho antes, lo más probable es que esté relacionado con el dolor. Los gatos son expertos en ocultar el dolor, por lo que es posible que no te muestre ninguna otra señal de que está sufriendo. Cualquier cambio repentino en el comportamiento, incluidas las mordidas, debe ser abordado por un veterinario de inmediato.
Conoce a tu gato y sé capaz de reconocer sus necesidades. Los gatos están estresados cuando se esconden constantemente, se acicalan demasiado, no usan la caja de arena, silban o gruñen, o incluso intentan morder. Si tu gato está constantemente estresado hasta el punto de morder, debes hablar con un asesor certificado en comportamiento felino o con su veterinario para obtener ayuda.
Comunicación
Si tu gato te muerde, es posible que esté tratando de llamar tu atención, además los gatos muerden para demostrar cariño.
Por último, los gatos pueden morder como una herramienta de comunicación o un medio para llamar la atención. Este tipo de mordida suele ser la menos grave: piensa en "mordiscos de amor" cuando hayas dejado de acariciar a tu gato y quiera más. Si tu gato te muerde y sigues acariciándolo, ¡ese mordisco funcionó! Él consiguió lo que quería.
Si el morder de tu gato es más un comportamiento molesto para comunicar que quiere algo, es fácil de arreglar. Simplemente ignora a tu gato. Levántate y aléjate. Cuando el gato esté sentado tranquilamente y no muerda, dale al gato lo que quiere como recompensa.
¡No castigues a tu gato!
Sobre todo, no se recomienda ningún tipo de castigo por morder. Responda siempre con calma y no agrave aún más la situación. Las investigaciones muestran que los castigos, incluidos los gritos, las botellas con chorros, los roces y los golpes físicos a su gato, no son efectivos y el gato no aprende de ello.
El gato es incapaz de establecer la conexión de que el castigo es consecuencia de haberlo mordido. Debes ignorar cualquier comportamiento no deseado y elogiar el buen comportamiento. Cualquier tipo de reacción negativa solo dañará aún más la relación con tu gato.
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